El Vaticano II, 60 años después... Logros y asignaturas pendientes

"El Vaticano II, 60 años después… logros y asignaturas pendientes". Bajo este título, Diego Molina sj, ha ofrecido la última conferencia del ciclo "Personajes y efemérides" programado para este curso por el Centro Suárez. Un balance profundo, objetivo y acertado sobre la aportación de este acontecimiento tan importante para la vida de la Iglesia.
La conferencia se ha articulado en torno a cuatro claves para entender la aportación y los motivos que subyacen al proceso de preparación y realización del Concilio Vaticano II convocado por el papa Juan XXIII y qué, tras 60 años de su finalización, sigue siendo el acontecimiento más importante e influyente en la iglesia de hoy.
1. Los deseos que surgieron en la Iglesia
- Retorno a la Palabra de Dios.
- Una Iglesia más humilde, libre y misionera que pusiera su centro en Jesucristo.
- Una sociedad más justa y una Iglesia empeñada en esa causa.
- Una Iglesia más cercana a los pobres y a la sencillez de la vida del Evangelio.
- Una Iglesia fraterna y comunitaria, que valora el término "Pueblo de Dios" y su condición de peregrina. Una Iglesia en comunión, donde todos se sientan hermanos llamados a vivir en el amor. Comunidad para compartir la fe y con una liturgia viva e inculturada.
- Una Iglesia dedicada a los más débiles
2. El legado del Concilio
Además de sus numerosos decretos y declaraciones, Diego Molina destaca la aportación de las cuatro constituciones del Vaticano II:
- Lumen Gentium: Responde a la pregunta que se hace la Iglesia sobre ella misma, sobre su ser.
- Sacrosanctum Concilium: Con la que se quiere iniciar la ansiada y necesaria reforma litúrgica.
- Del Verbum: Constitución dogmática sobre la Revelación en la que se coloca en el centro de toda la acción de la Iglesia la Palabra de Dios.
- Gaudium et Spes: Es la Constitución sobre la presencia y el modo de ser Iglesia en el mundo y en nuestro tiempo.
3. Los logros
- Iglesia "Semper reformanda". Esta expresión recoge la llamada a vivir en permanente actualización de tal manera que la respuesta de la Iglesia sea la adecuada para cada momento y lugar. Acentúa Diego Molina la conexión que hizo el Concilio entre la Eclesiología y Escatología al poner la mirada no en los logros históricos sino en la consumación al final de los tiempos.
- La Iglesia solamente se puede entender como alteridad: Con la Trinidad, con las otras confesiones cristianas, con religiones no cristianas y con el mundo.
4. Desafíos
- Desarrollar la catolicidad -universalidad-. Unidad en la diversidad de experiencias.
- Superación del clericalismo.
- Práctica del discernimiento
Termina su intervención invitando a ser fieles al espíritu del Concilio, al espíritu de la renovación iniciado hace 60 años.