Una amenaza nuclear se cierne en el horizonte

De los 60 conflictos bélicos que padecemos en la actualidad en el planeta, hay uno que interesa a todos por diversos motivos, el conflicto entre Rusia y Ucrania. Fundamentalmente por el evidente riesgo de poder emplear armas nucleares en el mismo. Posibilidad que ha sido descrita por los máximos actores del conflicto, como son; Vladimir Putin, Joe Biden, Volodímir Zelenski, y Josep Borrell entre otros.

Para hablar del riesgo de esta amenaza se ha invitado a un conocido periodista Andrés Cárdenas Muñoz que, con su habitual maestría descriptiva, supo centrar la historia de los conflictos y riesgo nucleares y lo absurdo de esta escalada armamentística. Por su parte Diego Burgos Trujillo (Físico nuclear), describió de forma más técnica y científica los fundamentos de estas armas, sus diferencias y las devastadoras consecuencias que tendrían sobre la humanidad y el medio ambiente si fuesen empleadas.

Las ideas fundamentales que se expusieron se podrían resumir de la siguiente manera:

• La carrera armamentística con armas nucleares es una realidad a la que se han sumado varios países como Rusia, China, Estados Unidos, Pakistán, India, Corea del Norte, Francia y Gran Bretaña.
• El poder destructivo de estas armas termonucleares puede ser hasta 1.000 veces mayor que la bomba de Hiroshima.
• La amenaza larvada por parte de los dirigentes es real, pero es solo eso, una amenaza.
• Nadie cree que esto vaya a suceder por las nefastas consecuencias que tendrían para la humanidad y el medio ambiente.
• Quedó patente la insensatez del ser humano, que es capaz de fabricar "estos monstruos", a pesar de las necesidades básicas (Nutrición, salud, higiene, etc.) que tiene gran parte de la humanidad.
• Se indicó también que hay otras formas de terrorismo radiactivo mediante la contaminación del aire, agua, etc. con productos habitualmente usados en los hospitales, etc.
• Junto a estas consideraciones negativas, se destacó la reticencia que hay con el uso "en positivo" de estas tecnologías para la obtención de energía consideradas no contaminantes, a diferencia de las empleadas habitualmente; carbón, combustibles fósiles, etc. Que representarían una disminución importante de la huella de carbono y del efecto invernadero.

Finalizadas las charlas de los invitados, los allí presentes quedamos sobrecogidos por el poder destructor que se ha logrado por esta vía, y se hicieron diversas preguntas que permitieron mitigar algo estas sensaciones.